Una de las más grandes películas de los 80 tenía que tener una canción emblemática. Y así fue. Tom Snow consiguió una melodía dulce que mostraba asimismo la fuerza característica de los temas inspiradores. El inicio del film con el pueblo decadente, la habitación de Cruise y el comienzo de un nuevo día para un adolescente que quiere por todos los medios cumplir sus sueños, es la mejor presentación posible para esta película. Los sueños de Cruise estaban en cierta medida atrapados en una asfixiante resignación, algo que él se ocupó perfectamente de superar gracias a su determinación. Otra canción meritoria es The last stand, esa melodía que suena mientras el equipo viaja en autobús. Esas caras de concentración, con la mirada perdida en el paisaje que se muestra por la ventana, las hemos vivido todos los que hemos tenido la fortuna de pertenecer a equipos deportivos. Esta es una de las razones por las que esta película es tan especial, y por la que sus canciones también lo son.27. ALL THE RIGHT MOVES (1983)
JENNIGER WARNES & CRHIS THOMPSON
